El jardín es un micro mundo en el que cohabitan muchos elementos: agua, piedra, madera, plantas, insectos, aves, microorganismos, personas... Podemos interaccionar con él, prestarle nuestros cuidados. Pongamos atención a todo lo que abarca, plantas y no plantas. Dedícale un tiempo a observarlo, te recompensará regalándote momentos inolvidables.
En el jardín están las plantas que hemos colocado nosotros, las que no hemos puesto y han querido instalarse (no las desprecies de antemano); restos de vegetales: hojas, ramitas,… También aves que pasan por él, insectos, caracoles…; y hay seres invisibles a nuestros ojos que en muchas ocasiones son los mejores aliados de nuestras plantas. No los dañes o destruyas indiscriminadamente. Algunos de ellos hacen la vida más fácil a nuestras plantas y sin ellos su vida se complica.
Así que, dediquemos un tiempo a este universo encantado que es nuestro jardín. Cuidémoslo con atención y amor. En cada rincón, descubriremos la magia de la vida en sus diversas formas y colores. En este espacio, donde convergen lo cultivado y lo espontáneo, se revelan tesoros que enriquecen nuestra conexión con la naturaleza. La recompensa será mucho más que un jardín hermoso; será una conexión más profunda con la vida misma.
Carmen Calvo Serrano
Ingeniera agrónomo y Paisajista
Directora de la empresa HABITERRA